Un Reconocimiento que Impulsa la Resiliencia y el Compromiso: Mi Trayectoria Empresarial
El pasado día tuve el honor de recibir un reconocimiento por parte del Ayuntamiento de Bilbao, en el marco de un evento que celebraba a aquellos referentes de la sociedad que, con esfuerzo y dedicación, han dejado huella en su comunidad.
Mi premio, en el área de empresa, fue una distinción que me llena de gratitud y que, más allá de ser un reconocimiento público, se ha convertido en un motivador de impulso y refuerzo al trabajo que ya venía realizando.
El evento en sí fue increíble. Un salón precioso, lleno de mujeres inspiradoras, con trayectorias de vida y profesionalismo alucinantes.
Fue un recordatorio palpable de la fuerza femenina que, muchas veces en silencio, ha trabajado para transformar realidades, y no solo de mujeres, sino también de personas que han luchado por abrir caminos, desde sus distintas realidades. Me siento orgullosa de formar parte de un colectivo tan potente, y el hecho de que este premio esté rodeado de tantas historias inspiradoras, hace que el reconocimiento sea aún más significativo.
Un Llamado a la Reflexión y el Reconocimiento Interno
Para mí, este premio no es solo un diploma que poner en la pared. Es, ante todo, una invitación a reconocer el trabajo realizado hasta ahora. Vivimos en un mundo que constantemente nos empuja a mirar hacia el futuro, a buscar el siguiente objetivo, el próximo reto, la siguiente meta. Pero, a veces, es necesario parar un momento y mirar hacia atrás para valorar lo que se ha logrado hasta aquí.
Recibir este reconocimiento también me ha llevado a una reflexión interna. Más allá del aplauso público, lo más valioso es el proceso interno de reconocer que, en cada paso dado, he estado construyendo algo significativo. He aprendido a confiar en mi intuición, en mi «brújula interior», que, aunque muchas veces no tuvo un mapa claro para seguir, me permitió avanzar con convicción.
La Resiliencia: Clave para las Empresas Emergentes
Una de las palabras que resonó con más fuerza durante el evento fue «resiliencia». Esta es, sin duda, una de las cualidades que me ha acompañado en cada etapa de mi emprendimiento. Mi empresa nació en un momento difícil, justo antes de la pandemia. La incertidumbre, el miedo y los desafíos económicos fueron nuestra constante durante los primeros años. Sin embargo, la resiliencia fue la que nos permitió seguir adelante.
Creo que no soy la única que ha vivido este proceso. Muchas empresas nacidas en estos años de crisis social y económica, al igual que la mía, han tenido que adaptarse, transformarse y, sobre todo, aprender a sobreponerse a situaciones adversas. Este reconocimiento no es solo un aplauso al trabajo bien hecho, sino también un homenaje a esa capacidad de adaptación y superación que tantas veces es invisible. Pero no solo las empresas han sido resilientes; las personas que las componen también lo son, y a ellas quiero dedicar un espacio de agradecimiento.
Agradecimientos: Mi Red de Apoyo
Recibir este premio también me ha dado la oportunidad de agradecer a quienes han sido parte fundamental de este viaje. En primer lugar, quiero agradecer a la Asociación de Mujeres Migradas Bilbaínas, que tuvo la generosidad de presentar mi candidatura. Ellas han estado allí, siempre presentes cuando se necesitaba un respaldo, cuando faltaba visibilidad o cuando simplemente se requería una mano amiga. La solidaridad que he recibido de esta asociación ha sido invaluable.
También quiero dedicar un agradecimiento profundo a mi familia. Sin su apoyo incondicional, no estaría aquí. Ellos han sido el pilar sobre el cual he podido construir cada paso de mi trayectoria. Han estado allí en los momentos de duda, de frustración, y también en los momentos de éxito. Su amor y apoyo han sido la base de mi fortaleza.
Finalmente, no quiero dejar de agradecerme a mí misma. Sí, lo sé, suena extraño, pero es importante reconocer el esfuerzo personal y el valor de confiar en uno mismo. En muchas ocasiones, he tenido que decidir entre seguir el camino marcado o tomar rutas inciertas, y el hecho de haber confiado en mi intuición, en mi propio instinto, me ha permitido llegar hasta aquí. Este reconocimiento es también un tributo a esa fuerza interna que no siempre es fácil de escuchar, pero que siempre sabe hacia dónde quiere ir.
Mirando Hacia el Futuro
Este reconocimiento llega en un momento clave para mi empresa. Aunque hemos logrado superar muchas dificultades, ahora más que nunca estoy convencida de que lo mejor está por venir. Este premio me impulsa a seguir trabajando con más energía, a fortalecer los proyectos actuales y a explorar nuevas oportunidades. Estoy convencida de que, a pesar de los desafíos que siempre surgirán, la resiliencia, el compromiso y el trabajo en equipo son la clave para seguir adelante.
Cada reconocimiento como este es un recordatorio de que el trabajo que hacemos tiene un impacto más allá de lo que imaginamos. Y si bien es un honor ser reconocida, también es un recordatorio de que debemos seguir luchando por los que vienen detrás de nosotros, por los que necesitan ese apoyo, esa visibilidad, y esa resiliencia.
Este es solo el comienzo de un camino que, aunque incierto, me llena de esperanza y determinación. Y aunque este premio ha sido un gran impulso, sé que el trabajo real y continuo es el que se hace día a día, con pasión y compromiso.
Mirando Hacia el Futuro
Este reconocimiento llega en un momento clave para mi empresa. Aunque hemos logrado superar muchas dificultades, ahora más que nunca estoy convencida de que lo mejor está por venir. Este premio me impulsa a seguir trabajando con más energía, a fortalecer los proyectos actuales y a explorar nuevas oportunidades.
Una de las claves de una pequeña empresa, como la nuestra, es la capacidad de hacer mejor las cosas que ya estamos haciendo bien. En nuestro caso, la sostenibilidad ha sido siempre uno de nuestros pilares fundamentales. Pero hoy, más que nunca, nos enfrentamos a un momento de reflexión y transformación, y eso nos lleva a anunciar algo muy importante.
Estamos a punto de implementar un cambio profundo en nuestro modo de operar, un paso más allá en nuestra apuesta por la sostenibilidad. Este nuevo enfoque será una evolución natural de lo que hemos venido haciendo, pero con un impacto mucho más tangible y comprometido. Será una manera de seguir siendo fieles a nuestros principios, pero también de adaptarnos y adelantarnos a las nuevas necesidades y retos de la sociedad.
No solo se trata de hacer lo mismo de manera más eficiente, sino de cuestionarnos cómo podemos ser más responsables, innovadores y coherentes con el mundo en el que vivimos. Este es un proceso que va más allá de la mejora continua, es un compromiso con el futuro que, como empresa, queremos seguir liderando.
Con este cambio, no solo esperamos impactar de manera positiva en nuestro entorno, sino también servir de ejemplo y fuente de inspiración para otras pequeñas empresas que, como la nuestra, buscan hacer las cosas bien, pero que a veces no tienen los recursos o la visibilidad para dar el salto hacia la sostenibilidad de manera efectiva.
Este es solo el comienzo de un camino que, aunque incierto, me llena de esperanza y determinación. Y aunque este premio ha sido un gran impulso, sé que el trabajo real y continuo es el que se hace día a día, con pasión y compromiso. Este es un hito importante, pero no es el final, sino un nuevo punto de partida.
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